Hacer máscaras caseras de pepino o frutas puede ser un error: algunos componentes naturales tienen ácidos que, al exponerse al sol, pueden manchar la piel. Lo ideal es consultar con un especialista antes de usar máscaras, naturales o cosméticas, para asegurar un buen resultado.

La aceleración de fin de año suele tener un efecto negativo en la piel, porque los altos niveles de estrés pueden hacer que la piel esté más sensible e incluso detonar cuadros de acné u otros problemas cutáneos. En este escenario, algunas máscaras faciales -caseras o dermocosméticas- pueden ayudar a descansar la piel y darle nueva vida. Funcionan como una especie de inyección de nutrientes, que vienen en concentraciones más altas que las cremas de uso cotidiano. Por lo mismo, entregan resultados rápidos. El tipo de nutriente dependerá del tratamiento que cada persona necesite. Existen máscaras de todo tipo, desde las de hidratación -con ácido hialurónico- hasta las antioxidantes, que incluyen vitaminas C, A, E y ácido glicólico. También las hay con oro y coenzima Q10, entre otros ingredientes.

Si bien existen muchas cremas que incluyen estos principios activos en sus formulaciones, las mascarillas suelen tener una concentración mayor, pues se trata de productos de tratamiento que no son de uso diario. Según explica la dermatóloga Yolanda López, directora médica del Centro dermoestético Le Ciel, este tipo de cosméticos se utiliza para abordar problemas que van desde el daño causado por el fotoenvejecimiento hasta patologías dermatológicas como la rosácea, el acné y las manchas.

- En una paciente que presenta manchas en la piel propias del daño solar (fotoenvejeciemiento), por ejemplo, se prefieren máscaras con una textura permeable, que permitan mayor absorción para ejercer su acción. Estas máscaras están compuestas por una arcilla coloidal (de grano fino). En el caso de un paciente con acné, en cambio, se escogen aquellas que presentan una textura viscosa, es decir, con un mayor contenido de agua y un menor contenido de crema en sus fórmulas, para no engrasar la piel. Las pieles secas, por su parte, requieren de máscaras de formulación oleosa, con textura en crema -acota la doctora López.

Las mascarillas faciales están especialmente formuladas para que, durante la aplicación, los poros se dilaten, permitiendo que estos ingredientes se absorban más profundamente.

- En el cuerpo o en las manos, por ejemplo, ocupar film plástico encima de la crema o gel ayuda a que el cosmético trabaje mejor -explica la doctora Natacha Quezada, de la Red Salud Christus.

También existen máscaras que producen un leve aumento de temperatura en la piel, similar a un efecto sauna, para ayudar a que los nutrientes entren más rápidamente en la epidermis. Forzar este efecto a través del sauna o las vaporizaciones está contraindicado en personas con rosácea, patología muy común entre los chilenos.

La mejor manera de determinar a qué tipo de mascarilla se debe recurrir es a través de una evaluación previa, realizada por una esteticista o especialista en piel, quien puede personalizar la rutina de cuidado y ajustarla a las necesidades y requisitos puntuales de cada persona. La mayoría de las máscaras se aplican en la casa sin problemas, aunque cuando la dermis está muy dañada o se utilizan cosméticos con una concentración muy alta de activos es recomendable recurrir a una cosmetóloga o dermatóloga. Esto, porque, mal aplicadas, las mascarillas de alta intensidad pueden desencadenar irritaciones cutáneas y finalmente producir el efecto contrario. Las mascarillas caseras, elaboradas artesanalmente con frutas, verduras, miel o leches, también pueden producir irritación o algún tipo de alergia; por eso los especialistas aconsejan probar primero una pequeña cantidad en el antebrazo.

La doctora Quezada advierte que en algunos casos las máscaras faciales pueden producir no solo alergias de leves a graves, sino también manchas, las que solamente pueden atenuarse con varias sesiones de láser o peelings químicos.

-En America latina, tenemos una predisposición genética hacia las manchas, porque la mayoría de la gente tiene un fototipo de 3 o 4, un tipo de piel más morena en la que van apareciendo estas manchas faciales (melasma) con los años. Por esta razón yo no aconsejo el uso de frutas, verduras,tomates, limón o pepino en la piel: tienen componentes ácidos que pueden manchar o provocar una fitofotodermatitis. El tomate o el pepino pueden aplicarse de noche, pero jamás cuando la piel va a exponerse a los rayos UV -explica.

A su juicio, una máscara casera hidratante que puede considerarse segura es una mezcla de vaselina líquida, yogur natural sin azúcar y avena, en partes iguales. Luego de mezclar los ingredientes, la máscara se aplica por 10 a 15 minutos sobre la piel previamente limpia. La especialista recomienda el uso de máscaras faciales una vez por semana en personas con trabajo de oficina, sin embargo esta frecuencia puede aumentar en quienes trabajan al aire libre y en televisión, donde la piel sufre por la luz de los focos.

El tiempo que cada máscara debe permanecer sobre la piel depende de su formulación y del tamaño de las partículas que conforman el principio activo del cosmético. La más común es la máscara astringente o detergente, que se aplica para ablandar comedones o espinillas. Estas máscaras sacan el residuo oleoso de la piel y disminuyen el espesor de la capa más superficial de la piel, debido a que las partículas astringentes que la componen interactúan con las proteínas de la piel para ejercer su acción. Estas máscaras no deben permanecer en la piel por mucho tiempo. Por el contrario, las que están compuestas por principios activos de antienvejecimiento (como la Coenzima Q10, la vitamina C o el colágeno hidrolizado) deben dejarse sobre la piel por al menos 20 minutos para que puedan cumplir su misión.

- Actualmente existen también otras máscaras que se aplican en el rostro y se las puede dejar actuar durante más de ocho horas. Estas provocan un efecto de estiramiento visible, dependiendo del componente que el profesional elija para el tipo de piel -puntualiza la doctora Yolanda López.

Para la dermatóloga Quezada, es fundamental cuidar la piel durante todo el año, pues ninguna mascarilla puede hacer milagros cuando el daño acumulado es mucho. La piel requiere de cuidados diarios a lo largo del año, que incluyen como mínimo una limpieza correcta, la aplicación de cremas nocturnas de hidratación -o de tratamiento, dependiendo del caso- y el uso de un factor de protección solar FPS 50+ como mínimo. Este último, dice, debe reaplicarse tres veces al día. En la playa o al aire libre, la frecuencia de aplicación del filtro solar debe aumentarse y repetirse hasta cada dos horas.

"No aconsejo el uso de frutas, verduras, tomates, limón o pepino en la piel, porque tienen componentes ácidos que pueden manchar o provocar una fitofotodermatitis".

 "Las pieles secas requieren de máscaras de formulación oleosa, con textura en crema".

Una de las claves para hidratarse de manera correcta es no tomar más de un litro de líquido en una hora.

Se habla mucho sobre la necesidad de hidratarse mejor en verano, pero hay que saber qué consumir y en qué cantidad para saciar la sed. Teresa Boj, nutricionista, explica que la necesidad de hidratación no es igual para todos y depende tanto de la temperatura ambiental que rodea a cada persona, como de la actividad física que realiza. Sentado en un escritorio con aire acondicionado, el cuerpo no necesita más que el consumo habitual. Pero al estar más de una hora al sol se requiere tomar mucha agua (sobre los 3 litros en el día) explica. La profesional asegura que lo más importante es no beber más de un litro en el espacio de una hora, sino ir espaciando el consumo a lo largo del día. Esto evita que surjan los síntomas de la deshidratación: sed extrema, sequedad de la piel, baja de presión arterial, mareos y, en casos más extremos, desorientación. Se recomienda tomar ocho vasos de agua al día, aunque muchas personas no son capaces de llegar a esa cantidad.

Han salido al mercado unas pulpas de frutas en sachet que representan una excelente alternativa para comer como tal, o bien para preparar jugos. Éstas no contienen preservantes, edulcorantes artificiales ni azúcar adicionada, explica Karen Villalón, nutricionista de Laboratorios Caledonian. También recomienda el agua filtrada o mineral acompañada de rodajas de fruta y/o hierbas como menta, albahaca y jengibre.

Néctar

Pulpa de fruta cocida filtrada, con azúcar o endulzante y preservantes. Según el Reglamento Sanitario de Alimentos (RSA), la cantidad total de azúcares adicionados no puede ser mayor a 200 gramos por kilo. Un vaso de 200 cc tendría aproximadamente 160 calorías solo en azúcar, sin considerar la de la propia fruta.

Jugo o Zumo

Se elabora a partir de un concentrado que se obtiene al evaporar el agua que está dentro de la fruta (agua vegetativa), al que se le incorpora agua, azúcar, saborizantes y preservantes. A diferencia de la pulpa, el zumo tiene menos calorías: según el RSA, no debe exceder los 50 gramos por kilo; en el caso de las frutas muy ácidas, 200 gramos.

Jugo natural

Se elabora con agua y fruta. No contiene preservantes ni azúcar o endulzantes artificiales. Se prepara en la casa y en algunos restaurantes. En caso de que se sirva muy concentrado, Teresa Boj recomienda diluirlo en agua.

Volver a lo natural es una tendencia mundial e innegable que abarca cada vez más ámbitos, y los detergentes no quedan atrás. Aquí unas recetas caseras para usar en el hogar.

Al comprar productos de limpieza, esperamos que hagan una cosa: limpiar. Para eso existe una amplia gama de perfumes, jabones, detergentes, blanqueadores, suavizantes, estropajos y ceras especializados para baños, vidrios, drenajes y hornos. Sin embargo, detrás de estos ingredientes para eliminar la suciedad y dejar las superficies libres de gérmenes, se esconde una realidad: muchos de ellos también contribuyen a la contaminación del aire en espacios interiores, son venenosas si se ingieren y pueden ser dañinos al ser inhalados o mal manipulados. Según la Organic Consumers Association, en algunos casos los productos de limpieza son los componentes más tóxicos que se encuentran en el hogar al ser potentes irritantes de los ojos, la piel y las vías respiratorias.

No obstante, existe una pequeña lista de ingredientes básicos que pueden reemplazarlos y que son seguros: el jabón, el agua, el bicarbonato de sodio, el vinagre y el jugo de limón. Utilizados correctamente, sirven para la mayoría de las necesidades de limpieza del hogar.

Una receta infalible para limpiar el hervidor y eliminar la acumulación de desechos minerales dentro de este aparato eléctrico es echarle vinagre. Basta hervirlo solo o con un poco de agua y dejarlo reposar. Luego se debe botar el líquido y enjuagar prolijamente el hervidor antes de volver a usarlo. También sirve el limón para quienes prefieren evitar el olor a vinagre.

El sitio web The Daily Green recomienda preparar una pasta de bicarbonato de sodio y agua para eliminar esas molestas manchas de comida que se acumulan dentro del horno. Invitan a cubrir el interior del horno sucio con la pasta hecha de agua y bicarbonato de sodio y dejar reposar durante la noche o unas horas, según sea necesario. Luego, con un paño húmedo, remover las manchas se transforma en tarea fácil.

Otro uso del bicarbonato de sodio es para destapar desagües. Según The Daily Green, se debe verter media taza de bicarbonato por el desagüe y en seguida dos tazas de agua hirviendo. Si eso no resulta, luego del bicarbonato de sodio se puede agregar una media taza de vinagre, tapar y dejar trabajar la efervescencia de la reacción química para que se disuelva la suciedad. Finalmente hay que enjaguar con unos tres litros de agua caliente.

Para el aseo

Para quitar el polvo y pulir, el sitio organicconsumers.org recomienda combinar una mezcla de vinagre blanco (1/2 taza) con una cucharadita de aceite de oliva (o un poco menos, en caso de que esta proporción deje los muebles de madera demasiado grasos).

Cereal de origen andino de color blanco, rojo o negro. Por su alto valor nutricional, está presente tanto en el mundo de la alimentación como en el de la cosmética.

La palabra quínoa, o quinua, significa "cereal madre" en quechua y es la semilla de una hierba que crece extensamente en el norte de Chile y las zonas andinas de los países vecinos. Técnicamente se le llama pseudocereal, pues no pertenece a la familia de cereales tradicionales, pero en la práctica forma parte de ella por la manera en que se consume y por su alto contenido de almidón. Como sea, es considerado por muchos como un alimento de un valor nutricional potente, cada vez más valorado.

Según Ximena Díaz, nutricionista, una porción de quínoa de 80 gramos aporta 300 calorías; 10,4 gramos de proteínas; 51,3 gramos de carbohidratos; 5,9 gramos de grasas totales y 2,2 gramos de fibra dietética. "La quínoa destaca por su alto contenido de proteína y de aminoácidos. Es el único alimento en el reino vegetal que entrega todos los aminoácidos esenciales", acota.

Además, este grano andino entrega calcio, hierro, potasio, magnesio, fósforo y zinc. Al ser libre de gluten, puede ser utilizado por las personas celíacas.La quínoa negra, en particular, contiene también mucho litio, que -según la nutricionista Alejandra Robinson- tiene efectos tranquilizantes.

Para las mujeres, su consumo es especialmente beneficioso, ya que contiene fitoestrógenos que previenen la osteoporosis y atenúan las alteraciones orgánicas y funcionales que habitualmente se producen durante la menopausia debido a la escasez de estrógeno.

Pero las bondades de la quínoa no se limitan al ámbito de la nutrición: de manera creciente, este grano forma parte de la formulación de productos de belleza. Hoy existen jabones, exfoliantes y mascarillas e incluso tratamientos capilares que la contienen. Ellos aprovechan su contenido de vitamina E, treonina (un aminoácido) y ácidos grasos que hidratan, suavizan y dan luminosidad. Está especialmente recomendado para pieles secas, sensibles e irritadas.

Son muchos los mitos que rodean a la cafeína, el componente más estudiado del café. Pero según reciéntes investigaciones de Harvard y Columbia, este componente podría considerarse un antidepresivo natural: las mujeres que toman al menos cuatro tazas de café al día tienen un 20% menos de probabilidad de sufrir un trastorno depresivo. Aquí rescatamos, además, otros de sus principales beneficios.

Si bien la cafeína se encuentra en el té, las bebidas energizantes, en productos que contienen cocoa y hasta en suplementos alimenticios, aproximadamente el 80 por ciento de la que se consume a nivel mundial proviene del café. Pero no todos los cafés son iguales. Y, cuando se trata de nuestra salud, cada tipo tiene pros y contras. Si bien el café no tiene la reputación de ser una bebida muy saludable, existen investigaciones médicas que demuestran lo contrario. Una de ellas, realizada por la Escuela de Medicina de Harvard, concluyó que la probabilidad de que las personas que consumen café padezcan cáncer de hígado disminuye en un 50 por ciento en comparación con aquellas que no lo consumen. La nutricionista Rinat Ratner, acota que "se ha asociado que la incidencia de Parkinson disminuye con el consumo de café y reduce también el riesgo de daño hepático crónico". Sobre la creencia popular de que el exceso de cafeína podría ayudar a la formación de osteoporosis y artritis reumatoidea, asegura que no hay información concluyente, ni como factor protector ni como factor adverso. Y agrega que si bien hay cierta asociación entre consumo de café y la elevación de los índices de colesterol y triglicéridos, ésta se da sólo al tomar café no filtrado y con más fuerza en personas que ya tienen problemas en estas áreas.

Una de las investigaciones recientes sobre el café que más ha llamado la atención fue realizada por científicos de las universidades de Harvard y Columbia, en Estados Unidos, y publicada hace poco por la revista Archives of Internal Medicine. Según sus hallazgos, obtenidos de una muestra de 50.739 mujeres, la cafeína podría considerarse como un antidepresivo natural: las mujeres que beben al menos cuatro tazas de café al día tienen un 20% menos de probabilidad de sufrir un trastorno depresivo, en comparación con quienes no consumen este estimulante del sistema nervioso. Cada vez hay más información disponible sobre el aporte nutricional de esta bebida, que entrega magnesio, potasio y vitamina B3 en pequeñas cantidades, además de muchos antioxidantes: tiene cinco veces más de estas moléculas antivejez que el té verde, nueve veces más que el té negro y casi tres veces más que el vino tinto. El mayor aporte se da en el café medianamente tostado y, como suele suceder, los problemas comienzan cuando el consumo es excesivo.

Pero, ¿cuántas tasas diarias de café nos aportan beneficios? Los especialistas aseguran que la dosis es variable y que dependerá de la salud de cada individuo. Por lo general, se recomienda tomar dos tazas al día para observar beneficios. El tomar más de nueve -límite bastante difícil de alcanzar- puede traer aparejado un aumento en el riesgo de sufrir algún trastorno cardiovascular. Esto sucede, según explica la nutricionista, porque con esta cantidad aumentan los niveles de homocisteina (un aminoácido) y disminuye la actividad de la vitamina B6, que protege el funcionamiento arterial. Deben tener más cuidado las personas que consumen otras fuentes de cafeína, como las bebidas cola, en grandes cantidades. También las que padecen de gastritis, úlceras gástricas y reflujo, ya que el exceso de café puede irritar la mucosa gástrica, y las mujeres que sufren de anemia, debido a que interfiere en la absorción del hierro. En el caso de las embarazadas, la recomendación es no pasarse de las dos tazas diarias recomendadas, aunque no existe evidencia clara del efecto del café sobre el feto.

Celulitis, ojeras y dientes

El café no es sólo un gran aliado para ayudarnos a despertar mejor y prepararnos para el día que vendrá. A nivel cosmético, también puede ser de gran ayuda: se usa en muchos productos para atenuar rojeces e inflamaciones en la piel. Y, también para mejorar el aspecto de las ojeras y bolsas. Todos son problemas que tienen un origen común: la piel de esta zona es en extremo delgada, más transparente y posee muchos vasos sanguíneos que literalmente pueden saltar a la vista. Además inciden, por supuesto, factores como la carga genética o el envejecimiento cutáneo precoz. Esto se puede prevenir hidratando la zona y aplicando productos específicos para el contorno de ojos y "camuflar" con un buen corrector, siempre que sea del tono de la piel, nunca muy blanco o gris pues hacen verse más cansada.

La cafeína, por su parte, es una ayuda -especialmente en el caso de las bolsas, puntualiza el doctor William Romero, dermatólogo - porque tiene un efecto descongestionante.

Su relación con la celulitis merece un capítulo aparte, ya que muchas personas creen que el consumo de bebidas con cafeína provoca un aumento de toxinas en la dermis que causaría la formación de la celulitis, y sin embargo muchos productos cosméticos que combaten la piel de naranja incluyen cafeína en su formulación.

¿Cómo se explica esta aparente contradicción? Según la nutricionista Rinat, no existe una asociación científicamente demostrada entre el consumo de café y la aparición de celulitis. Pero sí se sabe que la cafeína produce lipolisis, es decir, una degradación de la grasa, cuando se actúa directamente sobre la grasa localizada, como ocurre al utilizar tratamientos tópicos o cremas dermatológicas. Algunos médicos, como el doctor William Romero, aseguran que existen dudas sobre la capacidad que tendría la cafeína para penetrar la piel de manera lo suficientemente profunda como para lograr una reducción visible en la celulitis, por lo que recomienda optar por tratamientos con láser, radiofrecuencia o endermología.

Sin embargo, la Food and Drug Administration de Estados Unidos afirma que con cremas se pueden obtener beneficios en el corto plazo, siempre que se apliquen con regularidad y como complemento a una rutina de ejercicios, una dieta equilibrada y mucho consumo de agua.

Con los dientes hay que tener cuidado, ya que no importa de qué tipo sea el café que se consuma, siempre los manchará debido a la presencia del ácido tánico. Pero Peter Yaman, director de la escuela de odontología de la Universidad de Michigan, tiene algunos buenos consejos para atenuar esto, al menos en parte: tomarlo con leche, lavarse los dientes inmediatamente después de su consumo y, si esto no es posible, tomar agua.

Es una condición hereditaria que abunda durante la juventud, pero puede continuar en la adultez. Aquí, expertos aconsejan cómo mantenerla a raya.

Una piel algo grasa, con poros abiertos y reactiva. No suena bien e incluso evoca un mal recuerdo de piel adolescente, pero durante la adultez es bastante común. La causante de los poros abiertos, explica el médico Roy Sothers, es que a nivel de la segunda capa de la piel -la dermis-, se produce un aumento de volumen, ya sea porque hay más líquido o porque de alguna forma ésta tiene glándulas sebáceas muy hipertrofiadas (muy grandes).

Solamente en el rostro tenemos más de 300 mil poros, los que durante la juventud son más bien redondos, pero que con el paso de los años tienden a tomar una forma oval. Otro factor que influye en su tamaño es la sobrexposición solar, explica el doctor Tom Mammone, director ejecutivo de investigación y desarrollo biológico de Clinique. Como consecuencia, se produce mayor producción de sebo y eso se nota a simple vista. La piel, además, se torna más propensa a infecciones, lo que se transforma después generalmente en espinillas o puntos negros. "Los poros se abren cuando se llenan de secreciones grasosas y/o sebáceas, y como no pueden salir son obstruidos por la acumulación de células muertas y otras impurezas", explica Mónica Böhmer.

Para este tipo de pieles es importante realizar cuidados caseros, como dos exfoliaciones semanales para liberar a la piel de células muertas y sentirla más limpia, recomienda Mónica Böhmer. Entre los productos más usados para exfoliar a nivel profundo se encuentran las cremas con retinol, vitamina C, ácido glicólico y otros con poderes antioxidantes. En cuanto a la alimentación, no hay ninguna duda de que influye en la producción de mayor grasa en el rostro, señalan. "Es ideal que la dieta esté muy balanceada y que la alimentación sea lo más libre de grasa posible".

También existe una amplia gama de serums, primers, lociones y cremas, que ayudan a regular la secreción sebácea y, de paso, disminuir el tamaño del poro. Para la maquilladora María Paz Urra, el producto infalible es el "primer". "Al contener siliconas, rellena y empareja el tono de la piel, pero siempre sobre un tratamiento específico", dice. Opinión que Beatriz Palma, comparte, pues si bien están indicados para todo tipo de pieles, se recomiendan en especial para las personas que tienen la piel mixta/grasa con poros muy abiertos. "Suavizan la piel, eliminan las impurezas y reducen el tamaño de los poros", explica, agregando que, al no contener aceites, no aportan grasa a la piel. Al aplicarlo antes del maquillaje, el efecto se notará de inmediato, ya que funciona muy bien como pre-base, dejando la piel lisa, suave y mate, y reduciendo el tamaño de los poros.

Desde la menta hasta la melisa. Aquí los hits de la ecocosmética para desintoxicar, energizar y calmar.

Desintoxicar 

Para desintoxicar existe la salvia. "Actúa como depurante en el organismo así como en la piel y se usa como infusión para mejorar el drenaje linfático y con cierto efecto diurético", explica María Teresa Bravo. Se puede usar como exfoliante o preparar un tónico con una infusión helada que se aplica después del desmaquillante. Tiene excelentes resultados en acné o pieles mixtas.

"En las finas hojas del abedul se manifiestan procesos del metabolismo de la planta que producen aceites esenciales", explica María Ester Siri, cosmiatra de Weleda, agregando que sus principios activos vegetales estimulan la limpieza de la sangre y tienen un efecto drenante.

Calmar 

La melisa es una hierba calmante con propiedades antiinflamatorias y antiirritantes. "Es ideal para pieles muy sensibles, con rosácea o de fácil erupción", dice María Teresa Bravo. "Se puede usar como tónico en la piel, especialmente en aquellas que se alteran con facilidad", agrega. Según comenta Daniela Bertoglia, de Natura, la melisa, aunque es nativa de la región mediterránea, se cultiva mayoritariamente en nuestro continente. "Es apreciada por su fuerte aroma a limón y la utilizan en infusiones como tranquilizante natural, y su aceite esencial se aprovecha en perfumería", dice.

La manzanilla ofrece propiedades antiinflamatorias y antisépticas, es decir, ejerce una acción calmante sobre la piel, junto con fortalecer los tejidos. "Se pueden usar las flores de manzanilla para preparar champúes y aclarados capilares", dice María Ester Siri.

Según explica Paulina Vargas, la lavanda es considerada un suavizante, un bactericida, un purificante y un sedante. "Es muy utilizada en tónicos, aceites regeneradores y baños herbales", dice. "Sin embargo, al ser usada externamente resulta estimulante y antiséptica", aclara María Ester Siri.

La caléndula tiene propiedades curativas, descongestionantes y antiinflamatorias. Para los entendidos, aumenta el sistema autoinmunitario, acelera la regeneración cutánea y apoya el desarrollo sano de la epidermis.

Energizar 

El romero se caracteriza por estimular la circulación y el metabolismo. "Aumenta la irrigación sanguínea y tiene efectos estimulantes", explica María Teresa Bravo, experta en belleza natural, quien no recomienda su uso en embarazadas. "Tiene un efecto energizante en la piel, y se usa para pieles secas, ya que al estimular la irrigación sanguínea mejora la hidratación interna de la piel", comenta. No se recomienda su uso en embarazadas.

La menta es considerada una hierba aromática con propiedades energizantes. "Activa la circulación y es utilizada en aceites circulatorios y cremas corporales", dice Paulina Vargas.

La verbena ayuda a aclarar la mente y a desbloquear la energía estancada. Es depurativa, facilita la digestión y estimula la función del hígado.

Es habitual en la adolescencia, pero para un pequeño grupo de adultos sigue siendo un problema. Aquí algunos mitos y verdades.

El acné es una enfermedad multifactorial cuya incidencia se produce durante la adolescencia -afecta al 85% de los jóvenes de entre los 12 y 25 años-, convirtiéndose en un hecho fisiológico propio de este grupo etario. Sin embargo, son principalmente las mujeres quienes siguen sufriendo de este trastorno después de los 25 años, con una tasa del 12%, mientras sólo un 3% de los hombres continúan teniendo acné hasta la adultez. Dentro de los factores que más influyen en su aparición están el estrés y las alteraciones hormonales, junto con el uso de cosméticos aceitosos, que obstruyen los poros, señala William Romero, dermatólogo de la Clínica Dermovein.

Sus causas en la adultez son variadas. En parte, puede ser de origen fisiológico (algunos lo desarrollan hasta la edad adulta), pero también hay personas que lo desarrollan debido a alguna alteración hormonal o por el uso de cremas comedogénicas, o como efecto secundario al uso de corticoides o de otros medicamentos. La doctora Marcela Concha, profesora asistente de dermatología, aclara, además, que sí influye en su aparición algunos derivados de la vitamina B.

"Se han reportado brotes súbitos de acné por el consumo excesivo de vitaminas B1, B6 y B12, que mejoran al suspender la ingesta de estos productos", aclara el doctor William Romero.

Se debe estudiar en forma dirigida a aquellas mujeres que desarrollen el acné en forma tardía (después de los 25 años) o a aquellas que presenten un acné demasiado agresivo o refractario a tratamientos. "La mayoría de los acné tardíos son leves o moderados y el tratamiento es similar al de los adolescentes", advierte el doctor William Romero. Dependiendo de la gravedad, se puede tratar en forma tópica mediante jabones y cremas, o en forma oral con antibióticos o retinoides.

Existen, además, algunos productos que son especiales para pieles más maduras y algunos medicamentos que son más seguros en la adultez. Sin embargo, los expertos aclaran que efectivamente puede dejar cicatrices y manchas en la piel, por lo que se deben investigar las causas como el estrés o las alteraciones hormonales, dado que si éstas están presentes, los tratamientos convencionales pueden ser insuficientes para controlarlo. "Siempre se debe consultar a un dermatólogo para un diagnóstico correcto, para descartar un posible origen hormonal y para definir el tratamiento según la causa y el grado de acné", dice Soledad Aspillaga, dermatóloga, quien aclara que, generalmente, este "acné tardío" no deja más cicatrices que el acné del adolescente.

En cuanto a los avances tecnológicos, existen procedimientos dermatológicos como el láser que permiten desinflamar las lesiones, mejorar la textura de la piel, disminuir la grasitud y atenuar las manchas. "Si se descubren alteraciones hormonales el apoyo con un endocrinólogo o ginecólogo es de gran ayuda y si el estrés es el principal desencadenante, algunas terapias alternativas como el yoga o la asesoría de un terapeuta pueden resultar provechosas", agrega el doctor William Romero.

La rosácea, sensibilidad y alergias cutáneas. ¿Cuál es la diferencia? ¿Es nuestra piel más sensible que antes? Sepa cómo distinguir entre estas irritaciones y cómo detectar si necesita consultar a un especialista.

Los casos de pieles alérgicas y sensibles han aumentado en los últimos años. Tanto, que la Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que afectará al 50% de la población en el 2016 y que esto obedece a factores externos que están relacionados con la contaminación del aire, alimentos con preservantes, viviendas con muchas alfombras, acortamiento del período de lactancia materna y niños sobreprotegidos de infecciones banales a través de vacunas y exceso de consumo de antibióticos. Lo expertos señalan que todo ello provoca baja defensa inmunológica. Y la alergia es, justamente, un fenómeno inmunológico que requiere de lo que llamamos una sensibilización previa del paciente, es decir, haber usado anteriormente un producto o ingrediente al que le tenemos la alergia. La piel sensible, en cambio, indica una característica propia de la piel, comenta Rodolfo Klein, dermatólogo de Klein y Klein Dermatólogos. La piel sensible, dice, es más propensa a reaccionar a muchos productos.

De hecho, luego de una reacción alérgica hay un mecanismo inmunológico, en el cual se forman anticuerpos o defensas contra determinadas sustancias. "Es un proceso que lleva tiempo, por eso no se manifiesta al primer contacto del alérgeno con la piel y muchas veces las lesiones aparecen horas o días después de la exposición al químico o sustancia", dice la dermatóloga Patricia López.

En cambio, la piel sensible es aquella que responde con enrojecimiento, sequedad y/o descamación ante estímulos que son habituales como cambios de clima, estados emocionales, estrés, exposición al frío, al calor, al roce, aclara la dermatóloga Francisca Sánchez. "En la piel alérgica hay una respuesta inmunológica que es la responsable de la inflamación cutánea", aclara.

Los tipos de alergias

Las reacciones más frecuentes son las dermatitis de contacto alérgica (DCA), que provocan una reacción al entrar la piel en contacto con algún elemento que haya producido una sensibilización (por un contacto previo), explica el doctor Klein. Visualmente es posible detectar una DCA, porque aparecen eritemas (color rojo), vesiculaciones (pequeñas ampollitas o ampollas) acompañadas de una picazón. No obstante, a veces también se dice alergia a la llamada dermatitis de contacto irritativa (DCI), que es más frecuente que la anterior. En este caso, se produce un efecto inflamatorio en la piel por dos posibles razones: puede ser de concentración muy alta o con un pH distinto al de la piel, provocando una reacción en el paciente. La DCI, a diferencia de la DCA, no se reproduce en otras zonas, sino que solamente en la que se produjo la irritación.

 ¿Las causas?

Las sustancias que provocan alergias son tantas como tipos de pieles existen. Sin embargo, hay algunos que irritan mayoritariamente como los metales que contienen níquel y cobalto, que se encuentran en joyas de fantasía y plata y broches; mezclas de fragancias presentes en cremas y cosméticos, junto con la parafenildiamina de las tinturas de pelo. "Las mujeres son más susceptibles a alergias, después de la pubertad cuando ocupan una gran variedad de productos cosméticos y entra en juego un factor hormonal que lo favorece también como la historia familiar y la cronicidad", dice la doctora Emilia Zegpi.

¿La rosácea y eccema?

En el caso del primero, no es ni una alergia ni una sensibilidad. Se trata de una enfermedad, en que existe una sensibilidad extrema de la piel de la cara, cuya causa aún no está clara, pero se sabe que se debe a múltiples factores, desde hormonales, ambientales, sicológicos y digestivos hasta vasculares. En todo caso, se entiende por eccema una reacción alérgica crónica, es decir, prolongada en el tiempo.

Existe varias enfermedades que afectan nuestras piernas, tanto médicas como estéticas. Sepa cómo tratarlas.

La celulitis

La "piel de naranja" es una patología de la piel que se debe en gran parte a cambios hormonales y de circulación sanguínea, que afectan principalmente a las zonas de caderas y muslos. Se produce una acumulación localizada de grasa y líquido que resulta bastante difícil de erradicar, sin importar la edad, el peso o la contextura, ya que afecta tanto a mujeres con sobrepeso como a las delgadas. El estilo de vida sedentario influye bastante, también una dieta rica en grasas.

Además de la ingesta de agua, se recomiendan los ejercicios aeróbicos, como andar en bicicleta o la natación. Es importante en el caso del trote o cualquier deporte de impacto que éste no provoque dolor en las piernas; sería un impedimento para aquellas mujeres que ya tienen celulitis. El ejercicio mejora la calidad de la piel en general, como también la circulación, reduce la cantidad de lípidos, y esto siempre debe ser complementado con una alimentación equilibrada. "Las mujeres que sufren de dolores punzantes en las piernas o que tengan molestias articulares, es recomendable que no comiencen con trote, ya que esto solamente aumentará las molestias", dice Carlos Valdés, profesor y administrador de MEDS.

Al elegir un tratamiento estético para combatir esta patología hay que saber que el o la kinesióloga debe hacer un diagnóstico previo a cualquier tratamiento, para evaluar si la paciente sufre de várices, pues el calor emitido por las máquinas puede empeorarlas.

Las estrías

Según explica Marcelo Feres, cirujano plástico de la Clínica Sara Moncada, las estrías corresponden a una patología de la piel en la cual existe una pérdida de la continuidad estructural de las fibras de colágeno y elastina de las capas profundas de la dermis, sin afectar la capa superficial o epidermis. A nivel médico son condicionadas por una insuficiencia de la acción de las válvulas de los vasos venosos que retornan la sangre desde las extremidades hacia el corazón. Esto provoca congestión y dilatación de segmentos de venas que llevan a deformidades estéticas y funcionales en la paciente.

"Si la estría es reciente, existe la posibilidad de frenar el factor causal (salvo que se produzca en el embarazo sin aumento excesivo de peso), y tenemos opciones de manejo enfocados a disimularlas más que a resolverlas", dice Feres, quien agrega que esto se logra mediante la aplicación de variedades específicas de luz láser, cuyo objetivo es la aplicación de calor en las capas profundas de la piel, para modificar la estructura de las fibras de colágeno y elastina.

Si se trata de estrías en estado maduro, existen las mismas alternativas de manejo con láser y cremas ricas en vitaminas y oligoelementos, sin embargo con una menor respuesta desde del punto de vista estético. "Muchas sólo se pueden tratar mediante técnicas quirúrgicas, aunque no existe solución que las borre definitivamente", dice el cirujano plástico de la Clínica Sara Mondaca, quien recalca que el mejor tratamiento para las estrías es prevenir su aparición, evitando cambios importantes de peso en cortos períodos de tiempo, mantener siempre una piel bien hidratada, y asesoría médica y nutricional.

Para saber en qué fase se encuentran ("inmaduras" o "maduras"), tendrá que definir de qué color son. Aquellas con tono morado son nuevas o inmaduras, mientras que las más grisáceas ya entraron en fase de madurez. Si bien no existe tratamiento definitivo que las borre completamente, con la asesoría de un equipo multidisciplinario compuesto por cirujanos plásticos, nutricionistas, dermatólogos y médicos especialistas en aplicación de láser se pueden lograr mejoras importantes.

Complicaciones médicas de los tacos altos

En las mujeres que ocupan regularmente zapatos de taco alto en general se les produce un acortamiento de la musculatura posterior de la pierna y en el tendón de Aquiles, lo que vuelve esta zona más vulnerable a lesiones de las partes blandas y articulaciones del tobillo. "Además, se va produciendo un daño postural que va afectando a la columna vertebral, lo que conlleva finalmente a molestias y dolores musculares en la zona lumbar", dice Carlos Valdés, de MEDS.

Las várices 

La principal causa de aparición de várices es la herencia genética, aunque también existen otros factores de riesgo como la obesidad, el sedentarismo, el uso de anticonceptivos orales junto con los embarazos múltiples y seguidos. Con frecuencia los síntomas se exacerban cuando la persona se ve obligada a estar de pie durante muchas horas seguidas, pues hay una tendencia a aumentar la presión hidrostática ejercida sobre las válvulas y la pared venosa que tiende a dilatarse, según comenta el cirujano vascular-periférico Álvaro Carreño, de Clínica Dermovein. Se trata de un mal común, ya que las várices afectan entre 25% y 30% de la población femenina. "Sobre la edad de aparición, debido a la maternidad más tardía, las várices suelen surgir después de los 30 años", dice el cirujano vascular Cristián Salas, de Clínica Las Condes.Para evitar su aparición, aconsejan controlar el exceso de peso, evitar temperaturas ambientales elevadas, favorecer caminatas y practicar deportes como andar en bicicleta, nadar o trotar a bajo ritmo. Muy importante, según comenta el dermatólogo Víctor Hugo Correa, de Vitaclinic, es bajar la ingesta de sal y colocar las piernas en alto por sobre la altura del corazón por 10 minutos al menos dos veces al día.

La trombosis

"Si bien es una enfermedad muy comentada en los medios, el porcentaje en la población sana que sufre de ésta es bajo", explica Cristián Salas. El experto explica que los anticonceptivos tienen muchos beneficios, pero también efectos no deseados. "Es conocido el efecto protrombótico (que facilita la formación de una trombos) relacionado a la ingesta de los anticonceptivos orales, por lo que es muy importante insistir que la indicación de éstos debe ser realizada por un ginecólogo", enfatiza. Existen, además, personas que padecen de trombofilias, una enfermedad con mayor tendencia a la coagulación y, por ende, a hacer una trombosis.En cuanto a las embarazadas, les afecta la mayor dilatación venosa y la compresión de las venas del abdomen por el crecimiento fetal.

Con más de 30 mil variedades registradas en el mundo, las rosas representan al amor y son el clásico regalo para el día de San Valentín. Pero también son muy apreciadas dentro de la industria de la belleza, por sus innumerables beneficios cosméticos y medicinales.

Si bien existen en el mundo más de 30.000 variedades de rosas registradas, se estima que hay solamente entre dos y tres mil a la venta. En Chile, la más conocida es la Rosa Mosqueta, que se considera equivocadamente como endémica. Muchos creen que proviene de Chile, sin embargo, fue traída desde Europa por los españoles.

Los expertos explican que el mundo de la medicina ha realizado innumerables estudios sobre la Rosa Mosqueta, cuyo fruto es conocido como "la fruta de la eterna juventud", debido a su poder de recuperación de los tejidos en personas que han tenido que pasar por operaciones quirúrgicas, y se les han producido queloides o cicatrices hipertróficas.

Este fruto, además, es conocido por su capacidad de atenuar la aparición de arrugas, estrías y manchas. De hecho, el agua de rosas ha sido utilizado en la cosmética desde la Antigüedad. Paulina Vargas, de Bow Spa, comenta que las rosas silvestres -las más conocidas- contienen sobre todo vitamina C, hasta en un uno por ciento de concentración. "Puede parecer poco, pero poseen cinco veces más vitamina C que el limón.
Las rosas contienen también carotenos, vitamina B, azúcares, ácidos málicos y cítricos". También es rica en vitaminas como A, D, E y B3, que son poderosos antioxidantes. "Debido a estas propiedades se usa para calmar la piel, desinflamándola. Esta propiedad la hace ideal para pieles con rosácea, y gracias a sus propiedades antisépticas, limpia la piel ayudando a las pieles con acné o puntos negros a mejorar su apariencia", explica María Teresa Bravo de Babor Beauty. También es bueno para el pelo, dice, pues mejora la irrigación sanguínea hacia los folículos pilosos nutriéndolos y oxigenándolos evitando la caída del cabello.

En la cosmética las rosas se utilizan en cataplasmas para poros dilatados y heridas, en tónicos astringentes y cremas hidratantes y suavizantes. "También se pueden utilizar como antiséptico, antibacteriano, estimulante e incluso antidepresivo", comenta Paulina Vargas.

Tónico astringente

La agüita de rosas es fácilmente preparada en casa. Paulina Vargas entrega los siguientes pasos para lograrlo:

1. Prepare una infusión de dos puñados de pétalos de rosas en 500 ml de agua pura. Dejar reposar por 30 minutos.

2. Colar y agregar una décima parte de un vodka de buena calidad.

3. Pulverizar luego de la limpieza del rostro a unos 15 cm de distancia. También se le puede agregar a la infusión otras hierbas como la caléndula o la manzanilla.

Tras largos días bajo los rayos del sol, la piel cambia de tono. Junto con ello, también cambia la paleta de colores del maquillaje. Expertos entregan pautas para lograr un buen look para el día y la noche.

Isabel Bruna estudió Derecho, pero hoy se dedica a lo que más le gusta, el maquillaje. Creó un blog (www.makeupinsiders.com) que actualiza con sus consejos. Dice, por ejemplo, que en un cosmetiquero de verano no pueden faltar el agua termal en spray, los polvos traslúcidos y el bálsamo labial con factor solar.

Paso a paso

1. Si es necesario, aplicar corrector de ojeras, para emparejar el tono de la piel del rostro.

2. Aplicar una pequeña cantidad de sombra en polvo en el párpado móvil para iluminar el ojo, sin que éste se vea excesivo para el día. Optar por tonos dorados o grises suaves.

3. Delinear el ojo con lápiz café o gel y luego terminar con un rímel transparente si tiene las pestañas oscuras. Si es más rubia, puede recurrir a una máscara café para resaltar la mirada.

4. Pintar la boca con rouge o brillo de color fucsia para dar un toque fresco y juvenil.

5. Con una brocha grande fijar el maquillaje con polvos translúcidos, pues ayudará a controlar el brillo de la piel que se produce por el bloqueador solar. Otra técnica para mantener el maquillaje fresco durante el día es rociar agua termal.

Criss Mirande de la peluquería Be Cute, se especializa en maquillaje para novias, pero aquí entrega su versión de un look veraniego sofisticado para sacarle provecho a la piel bronceada durante la noche.

Paso a paso

1. Utilizar una base líquida más oscura de la que use durante el resto del año, que ojalá sea lo más parecida al tono de su piel.

2. Fijar con un blush de tonos dorados con brillo para iluminar.

3. Aplicar rubor en los pómulos. Marcar las manzanas suavemente, difuminando hasta la sien.

4. Para maquillar los ojos, dé pequeños golpes en todo el párpado (desde las pestañas hasta la ceja) con una sombra de color coral para levantar e iluminar el ojo. Aplicar una pequeña cantidad de base en el párpado para fijar la sombra. Si quiere profundizar la mirada con un tono oscuro, puede usar el cobre intenso en el párpado móvil. Si quiere lograr una mirada muy dramática, puede delinear con negro arriba de las pestañas y abajo con un lápiz café oscuro.

5. Para dar un look más juvenil, puede recurrir a un rouge con tonos naranjos.

Gaseosas fortificadas con colágeno en Japón, aguas minerales con antioxidantes que mantienen la piel joven, hasta un inhalador con algunas vitaminas esenciales. La consigna es ser saludable desde adentro hacia afuera.

El colágeno es la principal proteína que conecta y fortifica los tejidos y células de nuestro organismo. Es responsable de la elasticidad de la piel, pero su degradación conlleva a la formación de arrugas que vienen con el paso de los años. No obstante, en Japón, han encontrado una alternativa para su consumo con el fin de crear un efecto rejuvenecedor en el rostro, por sólo dos dólares. Lo que hicieron fue disolver este componente en aguas fortificadas con vitaminas y minerales y que tienen sabores de fruta. El objetivo es ser saludable desde dentro hacia afuera, posponiendo de paso el envejecimiento.

Otra opción cada vez más popular es ingerir directamente dosis controladas de vitaminas, las que sean absorbidas de forma más rápida a la corriente sanguínea. El ingeniero biomédico de la Universidad de Harvard, David Edwards fue el precursor de esta tendencia al crear un inhalador con vitaminas A, B1, B2, B3 y B5 llamado LeWhif Vitamin, a la venta en Gran Bretaña y Estados Unidos.

En Chile, ya han aterrizado algunas de estas aguas con vitaminas, pero quizás lo más extendido son los suplementos vitamínicos que cuidan zonas específicas del cuerpo, como por ejemplo pelo y uñas.

Son conocidos los efectos de las vitaminas en la salud del cuerpo y la piel: "Entre los agentes antioxidantes estudiados se incluye el té verde, aquellos presentes en las semillas de las uvas, junto con las vitaminas D y E, y el selenio. Todos ellos tienen un rol potencial en evitar o disminuir el fotodaño y fotoenvejecimiento", comentan el dermatólogo Cristián Vera y la nutricionista Verónica Irribarra.

La coenzima Q10 es otro antioxidante, y ampliamente vendido en el mercado como suplemento vitamínico para mujeres, al tratarse de un mecanismo de defensa que atrasa la oxidación (y, por ende, envejecimiento) del organismo. De hecho, la oxidación es un proceso involucrado en muchos desórdenes de la piel, incluso en el inicio de las lesiones cancerosas, explican los especialistas.

¿Es o no conveniente tomarlos?

La dermatóloga Francisca Sánchez, explica que, en general, los suplementos vitamínicos que prometen fortalecer las uñas, pelo y piel son recomendables, ya que están balanceados y sólo presentan contraindicaciones en personas con alergia a uno de sus componentes, o por una sobredosis. No es aconsejable ingerirlas por más de tres meses seguidos.

La nutricionista Paola Negrón explica, por ejemplo, que la vitamina C en altas dosis puede cambiar la acidez de la orina junto con favorecer la aparición de algunos tipos de cálculos. Además, existen minerales que interfieren con la absorción de algunos medicamentos y "compiten" entre sí, como el calcio con el fierro, por lo que siempre consulte un médico antes.

¿Inofensivas?Al momento de escoger un agua "vitaminizada", hay que fijarse en el contenido de azúcar, puesto que varias contienen altísimos niveles. La nutricionista Paola Negrón recomienda tomar ciertas precauciones, pues, en principio, una persona con dieta balanceada no debiera necesitar estos productos. "Las vitaminas tienen toxicidad si se consumen en forma exagerada", advierte.

Bajar dietas de internet o conseguírselas con conocidos puede provocar graves trastornos en la salud.

1. Dieta muy baja en calorías

En qué consiste: esta dieta se basa, principalmente, en un consumo de varias porciones de frutas y verduras al día, que no superen las 800 calorías. Muchas veces, estos regímenes no permiten mezclar tipos de alimentos, como grasas con proteínas, por ejemplo.

Efectos colaterales: déficit de vitaminas y minerales, baja de la glicemia, alteraciones en la función cardíaca, cálculos biliares, gota, arritmia y muerte súbita, si no se supervisa con un especialista. A nivel físico, se produce caída del pelo, confusión, somnolencia, cansancio, piel seca, uñas quebradizas y alteraciones menstruales.

2. Monodietas

En qué consiste: Comer un solo tipo de alimento al día, durante el período que dure el régimen. Las más conocidas son la dieta del repollo, del limón, del apio y del pomelo, entre otras.

Efectos colaterales: déficit de vitaminas y minerales, y trastornos de potasio y sodio, lo que se traduce en alteraciones de la conducción del corazón, que podrían derivar en arritmias. De la misma forma, con la baja de peso, disminuye la musculatura en general y, por consecuencia, la del corazón, lo que podría causar un paro cardíaco. Además, podría haber alteraciones en el ánimo, como gran irritabilidad.

3. Nuez de la India

En qué consiste: el pack contiene 12 semillas de nuez de la India (Aleurites Moluccana), las que, divididas en cuatro partes iguales, se deben consumir durante 52 días. En Chile, se consiguen ilegalmente a través de internet. Su consumo produce vómitos, diarrea y deshidratación.

Efectos colaterales: la baja de agua en el cuerpo produce trastornos electrolíticos (a nivel de minerales) y de potasio, elemento fundamental para el correcto funcionamiento de los músculos y, por ende, del corazón. La ingesta de las semillas de nuez de la India puede producir problemas cardíacos e incluso la muerte, puesto que este pack de semillas no está avalado por ningún estudio científico, y sus componentes no han sido certificados por la FDA.

4. Dietas cetogénicas

En qué consiste: son dietas altas en proteínas y grasas, pero muy bajas en carbohidratos. De esta forma, el organismo debe utilizar las grasas como fuente de energía y los músculos para bajar de peso. Todo esto se traduce en un brusco adelgazamiento, pero nada asegura la mantención de esta baja por tiempo prolongado, puesto que las dietas cetogénicas no modifican los hábitos alimentarios.

Efectos colaterales: en personas susceptibles podría aumentar el colesterol y los triglicéridos, y causar problemas a nivel de las sales del cuerpo. En casos extremos, los riñones dejan de eliminar eficientemente el ácido del cuerpo, por lo que aumenta la acidez de la sangre. Además, se producen calambres, problemas para respirar y mal aliento.

El actual interés por el tratamiento se debe a las tendencias de las últimas temporadas, como las chasquillas pesadas, y porque se ha incorporado cada vez más en los productos que se usan en la casa.

La queratina o keratina es un tipo de proteína formada por unidades más pequeñas denominadas péptidos. Se conocen dos tipos: la dura, que está en pelo y uñas, y la blanda, que está en la piel.

Cómo se aplica: Una vez que se lava el pelo, se pone el producto durante aproximadamente una hora y media a dos horas. Luego se enjuaga, se hace un brushing y finalmente se plancha para sellarlo. Los efectos pueden apreciarse durante cuatro, o incluso seis meses.

¿Por qué funciona tan bien?: Como la queratina es uno de los principales componentes del pelo, los expertos afirman que los efectos del tratamiento se aprecian instantáneamente. Los aceites naturales de la queratina envuelven el pelo para darle brillo y suavidad, nutriéndolo y reparándolo por dentro y protegiéndolo por fuera.

¿Quiénes pueden usarla? Puede utilizarse en todo tipo de pelo, con visos o teñidos e incluso en aquellos que fueron desteñidos. "Los tratamientos múltiples que aplicamos al cabello, como lavados, tinturas, brushing, alisados y otros, alteran la estructura química de las queratinas de la cutícula del mismo. Los tratamientos con queratina pueden restablecer el brillo y suavidad del cabello", dice la doctora Cecilia Orlandi.

Efecto "lavar y llevar": Aunque la gracia del tratamiento es el efecto "lavar y llevar", los expertos aconsejan secar el pelo desde arriba hacia abajo para prolongar los efectos del alisado. El sitio web del destacado peluquero británico Nicky Clarke (www.nickyclarke.com) recomienda utilizar champús sin cloruro de sodio y optar por productos que contienen queratina y protectores solares para optimizar sus efectos.

Riesgos: Según Magdalena Pinto, colorista y especialista en alisados orgánicos, dentro de los alisados con queratina existen dos tipos: con y sin formol. "Hasta hace algunos años, sobre todo en Brasil, se hacía el alisado de queratina con formol capaz de dejar liso todo tipo de pelo", dice la peluquera. Sin embargo, explica que se ha descubierto que el formol es un poderoso antiséptico, de olor fuerte (lacrimógeno) que irrita algunas partes del sistema respiratorio e incluso es un factor cancerígeno. Lo recomendable es que los productos no contengan más de 0,2%, el nivel autorizado.

Complicaciones: En cuanto a las complicaciones como daño al pelo o quemaduras al cuero cabelludo, los expertos señalan que todo depende del cuidado y habilidad de la persona que lo aplica. "Como con cualquier producto químico, se podrían producir reacciones alérgicas o irritativas, pero son escasas y tratables", afirma la dermatóloga Cecilia Orlandi.

Productos con células madre para detener el envejecimiento de la piel, es la nueva revolución en la biocosmética. Un área de la ciencia que avanza velozmente y donde es necesario distinguir entre los efectos de las células madre humanas y vegetales.

Con el paso de los años y las agresiones ambientales, la piel empieza a oxidarse y los tejidos van perdiendo progresivamente la capacidad de regenerarse naturalmente, por lo que pierde flexibilidad y firmeza. Para combatir ese paso inexorable del tiempo, distintas investigaciones han buscado la nueva fórmula del rejuvenecimiento a través del uso de las células madre en la cosmética. Para quienes se han visto alarmados por esta tendencia, los expertos aclaran que, lejos de ser de células de origen humano o animal, se trata de células madre vegetales.

Las promesas de regeneración y renovación celular de las células madre para combatir las arrugas han marcado un vuelco en las tendencias de la cosmética, pues estamos volviendo a lo natural. "Quedó atrás la noción de que lo químico era lo mejor. Hoy, hay un regreso hacia lo natural y todos los estudios demuestran que son el elixir de la juventud", explica la doctora María José Moreno, de Beauty Clinic, quien agrega que hay dos grandes técnicas que actualmente llevan la delantera en la biocosmética: la inyección de sangre rica en plaquetas -extraídas del propio paciente- y la aplicación tópica de células madre. "El concepto del envejecimiento de la piel es parecido a una herida crónica, pero se han visto muy buenos resultados con el uso de las células madre en pieles maduras que responden como pieles adolescentes", explica la doctora Moreno.

Algunas células madre secretan sustancias beneficiosas para los seres humanos, aunque no se ha determinado del todo qué contienen y por qué nos benefician.

Los científicos explican que lo que efectivamente se comercializa son sustancias extraídas o compuestos a partir de células madre vegetales como péptidos, proteínas y enzimas que promueven la producción del colágeno, componente que mantiene la piel joven. Por lo tanto, las cremas que existen, en palabras simples, están alterando cómo las células se "comunican" y "hablan" entre ellas y las señales que se producen en las capas subcutáneas. Finalmente, es el trabajo de los péptidos el que estimula la producción de la fibra de la piel.

Lo que estas cremas buscan no es que las células madre se incorporen a la piel, sino que ésta aproveche las sustancias que secretan, ya que actúan de forma biomimética, integrándose y adaptándose a los tejidos de cada órgano, en este caso la piel.

Para reestructurarla, estimulan la producción de las células madre adultas que se encuentran en nuestro organismo para que se autorregeneren. Finalmente, serán las sustancias secretadas las que alterarán el tejido de las células madre en las capas de piel superficiales (epidermis) y también en las capas más profundas (dermis), promoviendo la reactivación y producción de nuevas células de la piel. Y así se verá más tersa y joven. ¿Qué son las células madre y de dónde se obtienen?

Las más polémicas

Células madre embrionarias: Éstas se obtienen en los primeros días de un embrión recién fecundado. Aquí nace la controversia y los reparos éticos, pues extraerlas en esta etapa significa destruir el embrión. Son "totipotentes", lo que significa que pueden crear cualquier tipo de tejido de nuestro organismo.

Las más aceptadas

Células madre de cordón umbilical: Como su nombre lo indica, éstas se obtienen del cordón umbilical y la placenta que suelen ser descartados después del parto, y por ende no son controversiales. De hecho, hoy existen bancos de células madre para preservarlas y tratar posibles enfermedades en la vida del recién nacido, quien las aceptará, porque provienen de su organismo, junto con una alta probabilidad de no ser rechazadas en transplantes a familiares directos. Su extracción es segura e indolora.

Las más escasas

Células madre adultas: Generalmente obtenidas de la médula ósea o de la sangre, este tipo es difícil de identificar y extraer. La investigación en las últimas dos fuentes de células madres son aceptadas porque no requieren destruir un embrión. Éstas son clasificadas como "multipotentes"; si bien tienen mucho potencial, no pueden hacerlo todo como las "totipotentes".

En la nieve hay que protegerse de los rayos ultravioleta, por lo que es esencial el uso de un bloqueador de amplio espectro. Y no sólo en la montaña, también en la ciudad: los días nublados también representan un peligro.

Si bien se han duplicado los casos de cáncer de la piel en nuestro país en la última década, basta con seguir los cuidados básicos para disfrutar de la nieve y del sol sin riesgos. Recomiendan aplicar un protector solar 50 o más durante todo el año con reaplicación cada tres horas, junto con un factor solar específico para los labios y pelo, pues el frío y el viento, típicos de la alta montaña, queman la piel y resecan el pelo. Por ende, se recomienda llevar estos productos en envases "travel size" en el bolsillo para poder reaplicar cada par de horas y humectar el cutis luego de bajar de las pistas.

Según los expertos, el bloqueador solar es la mejor crema antiaging, ya que existe una correlación directa entre la aparición de arrugas y la exposición a los rayos solares. El fotoenvejecimiento, es decir envejecimiento debido a las luz, empieza con las primeras exposiciones solares, pues los daños son acumulativos.

"Los surcos profundos aparecen porque las fibras de colágeno y la elastina -que forman una suerte de malla de protección en la dermis junto con darle firmeza- se cortan y hacen que la piel se ponga gruesa y se dilatan los poros", explica la cosmiatra María Olga Estrada, quien agrega que es una reacción natural y automática de la piel para defenderse.

Para evitar este daño cutáneo se debe aplicar bloqueadores solares de alta protección, independiente del tipo de piel que tenga (existen seis categorías, siendo el tipo 1 el más blanco y el tipo 6, piel más oscura).

Un error recurrente es aplicarse protector en el rostro, pero olvidarse de las orejas, que forman una H en nuestro rostro. La parte horizontal de la llamada "zona H" pasa por los ojos, nariz y labio superior y las barras verticales por los costados de las mejillas y las orejas. Tampoco se debe olvidar de proteger las manos, el cuello y el escote, porque éstos están constantemente expuestos.

Como el cáncer de la piel es asintomático, se aconseja autoexaminarse incluso en partes del cuerpo que no se exponen al sol. Actualmente existe la posibilidad de realizarse un examen con escáner, con fines cosméticos y médicos, para evaluar los daños en las capas de la dermis inferiores con el fin de mejor cuidar la piel.

Cuando hablamos de máscaras de pestañas, la clave es la forma del cepillo y la técnica de aplicación.

Afinar detalles: Este tipo de cepillo tiene un efecto delineador y de alta definición, ya que se puede aplicar en 180° -horizontal, vertical y diagonalmente-. Su forma permite "arreglar los últimos detalles en los rincones del ojo", cuenta Lauren Luke, maquilladora británica.

Pestañas postizas: Los cepillos en forma elíptica con fibras de distintos tamaños son excelentes para separar las pestañas, mientras su grosor favorece una mirada intensa con pestañas largas con mucho volumen.

Anticaída: Los últimos descubrimientos tecnológicos incorporan células madre en los tratamientos de belleza para dar una mirada descansada, puesto que mejora la calidad de las pestañas, ayudándolas a crecer más fuertes y pobladas.

Efecto 3D: Gracias a sus cepillos con relieves, se crea una mirada dramática y la ilusión de tener muchas pestañas. Dan volumen, color y encrespan.

Cepillo vibratorio: Estos modelos consiguen todos los efectos: longitud, definición, separación y volumen. De muy fácil aplicación, se aprieta el botón al momento de aplicar la máscara, ya que la vibración de la varita separa y define mejor las pestañas desde las raíces hasta las puntas.

Cepillo en curva: El efecto es encrespar y levantar. Para Lauren Luke, estos cepillos son muy buenos para maquillar las pestañas en el rincón del ojo, aunque a veces requieren de varias capas para lograr el volumen deseado.

"Dos en uno": Estas máscaras consisten en nutrir y embellecer las pestañas. A través de una combinación de ingredientes activos como vitaminas y proteínas, el sérum nutritivo complementa el rímel que embellece la mirada.

Belleza natural: Los cepillos con fibras separadas otorgan una mirada definida, pero natural gracias a su cobertura de máscara en todas las pestañas, ya que las alarga sin grumos y de una sola pasada.

En lo más profundo del río Amazonas, y en lo alto de las palmeras crece el açaí, un berry con una potentísima carga de antioxidantes que protege la piel de las agresiones del medio ambiente y ayuda a combatir las líneas de expresión.

En la ciudad de Belém, en el estado de Pará, en el noreste de Brasil, comienza la travesía para llegar al corazón de la selva amazónica: allí donde crece el açaí, el berry con mayor concentración de antioxidantes y que la firma norteamericana Kiehl's utiliza como ingrediente estrella de su nueva línea de cuidado para la piel, Acaí Damage-Repairing Skincare Collection.

Desde Belém parte el equipo de Kiehl's -acompañado de periodistas de revistas femeninas de varios países del mundo- hasta uno de los innumerables brazos del río Amazonas. Primero, largas horas en bus. Segundo, largas horas en un ferry río arriba. Mosquitos. Lluvia intermitente. Calor. Humedad. ¿El destino? La comunidad de Nazarezinho, una de las pequeñas aldeas de la zona cuyos habitantes se dedican exclusivamente a la recolección del açaí, temporada que se extiende desde septiembre a diciembre.

La palabra açaí, según los indígenas, significa "la fruta que llora", y cuando se la ve colgada desde lo alto de las palmeras se entiende el nombre. Este berry -pequeño, redondo y de color rojo oscuro- cuelga como lágrimas desde las ramas. Son los hombres los que trepan hasta lo alto a pie pelado, llevando un machete sujeto al pantalón o incluso afirmado con los dientes: se agarran con una mano y con la otra van cortando. En este momento comienza el trabajo de las mujeres: en grandes canastos reciben los racimos de açaí.

Desde la selva llega a los laboratorios de Kiehl's, donde comprobaron clínicamente los importantes beneficios que otorga a la piel: combate las agresiones del medio ambiente y estimula el proceso de renovación de la epidermis para mejorar y mantener su aspecto saludable y luminoso. Un estudio que se realizó con 50 mujeres de entre 30 y 65 años, durante cuatro semanas, dio como resultado que el 88% de ellas consideró que su piel se veía más firme; el 84%, que la encontraba más luminosa; el 75% que le habían disminuido las líneas de expresión, y el 65,3% señaló que le habían disminuido los granitos y puntos negros.

La colección cuenta con cuatro productos: un limpiador, un tónico, una crema humectante y un sérum que, además del extracto de açaí, contiene ingredientes como jugo de aloe vera y aceites esenciales de lavanda y romero.

El açaí, una comida tradicional en la selva amazónica (lo convierten en salsas, helados y postres, entre otras cosas), es considerado un "súper berry" por su excepcional nivel de nutrientes, antioxidantes y potenciales beneficios para las personas, en comparación con otros alimentos. Por su nivel de antioxidantes es capaz de ayudar a prevenir y revertir la oxidación de las células de la piel, producto de las agresiones del medioambiente y del estrés de la vida diaria.

El Orac Value (Oxygen Radical Antioxidant Capacity) -el índice con el que se mide la capacidad antioxidante de las frutas- del açaí es claro: mientras la uva roja ostenta 11 puntos; la manzana roja, 14; el arándano, 32 y la granada, 106, el açaí tiene 167.

La palabra aÇaí, según los indígenas, significa "la fruta que llora", y cuando se la ve en lo alto de las palmeras se entiende el nombre.

Existen dietas drásticas desintoxicantes y terapias de shock para limpiar el organismo. Pero nuestra propuesta es otra: un cambio en el estilo de vida con una alimentación saludable, ejercicios y rutinas de relajación.

Tratamientos cosméticos y relajación

Como la piel es un órgano desintoxicante, es esencial mantenerla limpia para evitar que los poros se obstruyan y se produzcan irritaciones o infecciones. La mejor receta para desintoxicar la piel es limpiarla e hidratarla todos los días. Además, se recomienda la exfoliación para remover las células muertas que tapan los poros y el uso de aguas termales por su efecto antiinflamatorio. La medicina china y el ayurveda son conocidos por sus terapias desintoxicantes. El masaje ayurvédico, por ejemplo, tiene como objetivo relajar, reabsorber el estrés y facilitar el sueño. Al estimular la circulación sanguínea, permite eliminar las toxinas, recargar energías y prevenir enfermedades.

Un baño de sales casero también tiene una acción purificadora. Disuelva 250 gramos de sal de mar en agua tibia y tome un baño de quince minutos. Después exfolie la piel con una mezcla de sales marinas y leche. Realice un masaje corporal (no facial) con esta pasta y luego dúchese. Termine la terapia con una crema hidratante.

Alimentación

No hay desintoxicación sin agua. Si el cuerpo no tiene la suficiente agua para eliminar las toxinas, el organismo se transforma en una "piscina de veneno" que puede provocar enfermedades incluyendo problemas a la piel. Se recomienda tomar entre 6 y 8 vasos de agua al día (no cuentan las bebidas o jugos).

Las frutas y verduras también son importantes, por lo que los expertos recomiendan aumentar su consumo diario y empezar el día con un jugo de berries, cuyo poder antioxidante es muy beneficioso para la piel. También es un buen desintoxicante el siguiente cóctel tailandés: exprima un pepino pelado sin semillas, una manzana roja, cuatro zanahorias y media betarraga en ese orden. Luego pase por la exprimidora un trozo de jengibre, mezcle todos los ingredientes y agregue hielo.

Otros tips para una alimentación desintoxicante son reemplazar los carbohidratos refinados por granos enteros, sustituir la carne roja por el omega 3 del pescado, evitar los azúcares, cocinar con aceite de oliva o sésamo y consumir frutos secos y semillas.

Actividad física

Uno de los principales beneficios de ejercitarse regularmente es el aumento de la circulación sanguínea y linfática. La sangre y los fluidos linfáticos distribuyen los nutrientes esenciales a las células y remueven los residuos tóxicos.

Cualquier ejercicio aeróbico que se practique por 30 minutos 3 veces a la semana es suficiente. La idea es aumentar la circulación, relajar los músculos y botar toxinas.

El yoga también es un excelente desintoxicante. Algunas posturas específicas, como la del perro, los giros de columna y las piernas contra la pared, estimulan el proceso de purificación.

En cantidades óptimas, el azúcar es esencial porque proporciona la energía necesaria a las células para su buen funcionamiento. Pero en exceso, hasta la piel se resiente. Y es que la glicación o "caramelización" de las proteínas acelera el proceso de envejecimiento.

Con los años la piel se seca, se adelgaza, se mancha, pierde elasticidad y se rigidiza. Son las consecuencias del envejecimiento cutáneo en el que juegan un rol determinante dos fenómenos fisiológicos inherentes a la evolución de la piel: la oxidación y la glicación.

La teoría del envejecimiento por radicales libres -la oxidación- fue muy cuestionada a mediados de los 50 cuando el doctor Denham Harman la formuló, pero hoy cuenta con la aceptación de la comunidad científica internacional. La degeneración a nivel celular que producen estos átomos reactivos e inestables ha sido ampliamente estudiada, y en el mundo de la dermocosmética las investigaciones han sido claves para formular productos antioxidantes, que combatan los radicales libres y ralenticen el envejecimiento.

Pero la glicación es un metabolismo menos conocido en el mundo de la dermocosmética, a pesar de ser una de las causas principales de la pérdida de elasticidad y luminosidad de la piel.

"La glicación o glicosilación es un proceso en que los azúcares ´atacan´ y deterioran las proteínas del cuerpo", explica la dermatóloga Cecilia Orlandi. En palabras simples, la glicación se produce cuando un azúcar se adhiere a una proteína, "caramelizándola" y tornándola rígida y quebradiza. Este mecanismo fisiológico, lento e irreversible, afecta a todo el cuerpo y, en el caso de la dermis, a una de sus proteínas más importantes: el colágeno. Paralelo a este proceso se produce una disminución de fibroblastos, lo que asociado a una menor regeneración y reparación de las fibras, trae como consecuencia la pérdida de elasticidad y aparición de arrugas.

Cómo combatir la glicación

Una forma de mantener la glicosilación a raya es a través de una dieta saludable con moderado consumo de azúcar (glucosa y fructosa). "Los niveles elevados de glucosa en la sangre, como en los diabéticos, acelera el proceso de envejecimiento no sólo de la piel sino de todos los órganos del cuerpo", advierte la doctora Orlandi.

Hoy también existen productos cosméticos con tecnología antiglicación, "que actúan como un señuelo o un agente de distracción para prevenir que el exceso de azúcar se adhiera o se fije en las vitales fibras de colágeno y elastina", explica Andrea Galindo, jefa de educación de Clinique. Están, por ejemplo, los productos con aldenine, un compuesto de proteínas vegetales que contrarresta el efecto de glicación y acelera la síntesis de colágeno III. Su principal ingrediente activo es un tripéptido GHK (Glicina-Histidina-Lisina).

Muchos anticelulíticos también están formulados con activos antiglicación, ya que al alterar la calidad de las proteínas, la glicación afecta la microcirculación.

El maquillaje quedó mal, pero no hay tiempo para empezar todo de nuevo. Aquí tres maquilladoras nos entregan las claves para salir del paso de manera simple y rápida con la ayuda de dos herramientas: cotonitos y desmaquillante.

1. Tono equivocado de base: Un error común y "fatal", según la maquilladora de L'Oréal Paris Joyce Power, es elegir mal el tono de la base. Muchas mujeres escogen tonos más oscuros que el de su piel, "pero la función de la base es emparejar, no crear el efecto bronceado", advierte.

Solución: Si la base produce un efecto de mascarilla, la única opción es retirarla con desmaquillante. "Hay que probarla en nuestra mandíbula inferior y hacia el cuello. No en la mano".

2. Grumos de máscara: Además de los grumos, la máscara de pestañas puede manchar los párpados y la zona de las ojeras, sobre todo cuando el producto está viejo. Las maquilladoras recomiendan cambiarla cada tres meses.

Solución: Para limpiar las zonas sucias lo más fácil es pasar un cotonito con desmaquillante no oleoso sólo en las zonas afectadas. Si las pestañas quedaron grumosas o pegoteadas, Taly recomienda usar un cepillo de cejas que tenga peinetita al otro lado. "Se debe poner el dedo índice en el párpado por detrás de la pestaña y con la otra mano pasar la peinetita por la pestaña presionando el dedo para que queden ahí los grumos".

3. Exceso de colorete: La mayoría de las mujeres "chupa" las mejillas hacia adentro para aplicar el rubor, cuando la forma correcta es sonreír y aplicar el tono sólo sobre la parte pronunciada y no en línea diagonal hasta las orejas.

Solución: Cuando ponemos demasiado rubor, debe pasarse una esponja o brocha con polvos translúcidos por encima. Eso le da más naturalidad, "se ve el rubor pero se entremezcla con la piel", explica la maquilladora Taly Waisberg. Otra forma de bajar el tono es con un cisne (esponja suave de las que venían en los polvos de las abuelitas).

4. Restos de sombras: A veces manchan todo el contorno de los ojos o forman pliegues en el párpado. El delineador también es un problema si la línea queda muy gruesa o irregular.

Solución: Joyce Power recomienda corregir el exceso de delineado con un cotonito con desmaquillante y, si el trazo es irregular, pasar un cotonito seco para difuminar. Para evitar pliegues, Carolina Lazo aconseja aplicar antes polvos translúcidos.

5. labial corrido: El delineador o el labial que sobrepasan la línea natural de los labios provocan el efecto "payaso". Más todavía cuando el color es fuerte o brillante.

Solución: "Para lograr una boca bien definida, primero se dibuja la forma con un lápiz y luego se maquilla. Si nos salimos de los márgenes corregimos limpiando el exceso con un cotonito y luego aplicando con un pincel delgado un poco de corrector del tono de la piel para dar nuevamente forma a los labios", explica Carolina. Si el color quedó muy "encendido" o con mucho brillo, podemos matizarlo con un tissue.

Sol, sudor, viento, agua y cloro son agentes que agreden nuestra piel si no acompañamos la práctica deportiva al aire libre con buenos productos cosméticos. Cada deporte y cada parte de nuestro cuerpo requieren cuidados específicos.

Rostro: Cuando practicamos algún deporte al aire libre, no importa la época del año, es imprescindible el uso de fotoprotectores elevados (FPS 30 como mínimo), resistentes al agua y la sudoración, para proteger el rostro y el cuerpo de las agresiones de los rayos UV y el envejecimiento cutáneo prematuro. Pero en el caso de los deportes acuáticos el cuidado debe intensificarse, ya que el agua no sólo puede remover el fotoprotector, sino que además actúa magnificando la intensidad de los rayos solares.

Transpiración: Cuando nos ejercitamos, la temperatura del cuerpo aumenta y aparece el sudor, que tiene la función de regular la temperatura, eliminar agua y toxinas. El sudor no tiene mal olor, pero las bacterias que se alojan en él pueden provocarlo. Los antitranspirantes se usan para evitar la secreción de sudor, tapando los poros, por eso es que sólo deben aplicarse en la zona de las axilas. Un desodorante, en cambio, encapsula el mal olor, pero no evita la transpiración.

Pelo: Cuando practicamos ejercicios el pelo sufre. Pero hoy existen sprays con filtros UV y champúes y mascarillas nutritivas, que actúan protegiendo y reparándolo. En el caso de los champúes, lo recomendable es utilizar fórmulas ricas en vitaminas y proteínas, y de baja espuma, ideales para deportistas acuáticos que se lavan el pelo más de una vez al día.

Zonas sensibles: El contorno de ojos y los labios son zonas donde el uso de fotoprotectores es obligatorio. Los productos para labios contienen protección solar de amplio espectro, además de vitaminas antioxidantes y potentes hidratantes como la manteca de cacao y el extracto de jojoba. Para el contorno de ojos, las cremas combinan protección UVB y UVA con activos anti-aging.

Pies: Los pies están expuestos al roce con las zapatillas, y esto, por ejemplo, puede producir grietas, ampollas o callos, mientras que la sudoración ablanda la piel formando un medio propicio para bacterias y hongos. Cuando el sudor es excesivo, lo recomendable es usar polvos antitranspirantes. Además, los pies deben exfoliarse y humectarse periódicamente con productos específicos, para evitar que algunas zonas se engrosen y puedan hacerse heridas.

Cuerpo: Como es rica en sales minerales y oligo-elementos, el agua termal fortifica las defensas naturales de la piel y le devuelve humectación. Esto es especialmente importante después de la práctica deportiva, ya que la humedad y sudoración eliminan en parte la capa grasa que protege la piel; la epidermis se deshidrata y pierde brillo.

No sólo como alimento, la sal pura es más saludable que la refinada. En cosmética, cada vez más productos y tratamientos de bienestar tienen a la sal cristalina como ingrediente principal.

Las propiedades terapéuticas de la sal son legendarias. Los cristales de sal pura -marina o de roca- son una importante fuente de oligoelementos (minerales y metales que se encuentran en cantidades ínfimas en los seres vivos, pero que son indispensables para el funcionamiento del organismo) que, gracias a su composición parecida a la del plasma sanguíneo, el cuerpo humano absorbe fácilmente.

El dermatólogo Patricio Figueroa explica que la sal tiene un efecto antibiótico, alivia las inflamaciones, es un buen cicatrizante de heridas y tiene un efecto desodorizante. Incluso, "algunos tipos de sal se usan en el tratamiento de enfermedades de la piel como la psoriasis", afirma.

En el mundo de la cosmética y salud de la piel, la sal del Mar Muerto y la llamada sal del Himalaya son famosas por sus cualidades revitalizantes, antiestrés, exfoliantes y tonificantes. Mientras la sal refinada contiene más de un 90% de sodio, la sal del Mar Muerto tiene sólo un 10% y el resto de sus componentes son minerales esenciales para la salud de la piel, como el magnesio, el potasio y el calcio.

La sal del Himalaya, por su parte, es tan rica en minerales como la sal de mar y, gracias a que se obtiene de depósitos marinos que datan de la era jurásica, se dice que es libre de contaminación y toxinas.

La haloterapia, que consiste en respirar en un ambiente saturado con aerosoles de sal, surgió como tratamiento para afecciones respiratorias y alérgicas, pero hoy se utiliza también como terapia de relajación y cosmética, ya que la combinación de temperatura, humedad y cantidad de aerosoles de sal mejoraría el aspecto de la piel y el pelo.

Son prácticas arraigadas que, poco a poco, deterioran la piel de la cara. Aquí, las que más se repiten.

1. Escoger los productos equivocados: Usar productos cosméticos sin considerar nuestra piel es un error grave. "Debemos considerar dos cosas principalmente: nuestro tipo de piel y qué tan sensible es ésta", explica la dermatóloga de Skinmed Claudia Ramírez. En pieles muy sensibles, por ejemplo, siempre deben aplicarse productos hipoalergénicos, libres de fragancias. También debemos considerar el tipo de clima y la estación del año, advierte la cosmetóloga Angélica Contreras.

2. Descuidar las zonas sensibles: La piel de los párpados es la más fina de toda la superficie cutánea, lo que la hace muy sensible al paso de los años, al movimiento constante (refregarse los ojos, por ejemplo) y al medio ambiente. La piel del cuello y el escote es igualmente delicada: tiene poca tolerancia al sol y a los productos potencialmente irritantes. La recomendación es usar productos especialmente formulados, no olvidarse de la limpieza y de la protección solar diarias.

3. Sol sin protección: Todavía hay quienes creen que durante los días nublados el sol no es dañino. Lo cierto es que si la exposición solar es inevitable, la única alternativa es usar protector solar de amplio espectro. Por tratarse de una piel sensible, rostro, cuello y escote deben cuidarse con SPF 50. Los factores solares con Mexoryl o Helioplex ofrecen un cuidado más duradero.

4. Mantener malos hábitos: Fumar le hace mal a nuestra piel, la mala alimentación y la falta de ejercicio también. Y si el estrés no le va bien al cutis, tampoco el trasnoche. El descanso nocturno es fundamental para prevenir el envejecimiento prematuro de la piel, "porque durante este período el organismo limita al mínimo la producción de radicales libres y, al mismo tiempo, elimina o neutraliza aquellos que se han producido", explica Angélica Contreras.

5. Dormir con la cara sucia: Si dormimos con la cara con restos de maquillaje, la piel sólo absorberá suciedad. Hay que seguir una rutina: desmaquillar; usar un limpiador en el rostro y el cuello, y retirar el producto con papel tissue o agua fría; utilizar una loción y aplicar el tratamiento nocturno con suaves masajes para facilitar su penetración. Sólo si la piel está limpia, valdrá la pena invertir dinero en cremas y sérum de noche.

6. Exceso de productos: Entre los ingredientes más riesgosos de combinar están el retinol, el ácido glicólico, la vitamina C y el peróxido de benzoílo. La recomendación es no usarlos al mismo tiempo un producto sobre el otro, sino distanciar su aplicación a lo largo del día.

7. Usar brochas y esponjas sucias: Las esponjas y brochas de maquillaje deben lavarse, porque detrás de los restos de corrector, base, rubor o sombra se esconden bacterias. Deben lavarse con un champú anti residuos por lo menos cada 20 días en invierno y diez días en verano.

8. Sobreexfoliar: Una vez por semana es suficiente. Si lo hacemos más seguido, "podríamos eliminar demasiadas células vivas, aumentando la posibilidad de dañar e irritar nuestra piel", afirma Angélica Contreras. Incluso la sobreexfoliación puede exacerbar la producción de aceite y empeorar el acné, ya que la bacteria se difunde.

Gracias a su composición y modo de acción, las algas son cada vez más importantes para la salud y el cuidado de la piel.

Pardas, rojas, verdes y azules. Las algas deben sus diferentes colores a la cantidad de luz que reciben, y todas comparten una característica: su enorme capacidad de absorber y concentrar sales minerales, vitaminas, oligoelementos y aminoácidos. Por eso que estas plantas son cada vez más cotizadas en la industria cosmética.

Existen más de 25.000 especies de algas catalogadas, aunque sólo se aprovechan unas treinta para elaborar cremas, champúes, jabones y geles. El uso cosmético de las algas es doble: por una parte se utilizan como agentes gelificantes, espesantes y estabilizantes en la composición de los productos; y, por otra, se aprovechan sus propiedades tonificantes, regeneradoras celulares, limpiadoras, hidratantes, suavizantes y antioxidantes.

Algunas algas se utilizan para reafirmar la piel, ya que sus componentes ayudan a restablecer la red de colágeno, mejorando la elasticidad, devolviendo la firmeza y lozanía. Otras actúan como desintoxicantes, tienen un importante efecto antioxidante, aumentan la actividad metabólica a nivel celular y mejoran la microcirculación del cuerpo.

Además, las algas son conocidas desde la antigüedad por su capacidad lipolítica (eliminación de grasas) gracias a que aumentan la actividad metabólica celular. Por último, las algas del tipo Nori, actúan como un poderoso bloqueador solar.

Las algas más utilizadas en la cosmética son:

Algas verdes: Son las que están más cerca de la superficie. Poseen propiedades suavizantes, hidratantes, antiinflamatorias y relajantes. Un ejemplo: Ulva lactuca, rica en magnesio, fósforo, vitaminas A y C.

Algas pardas: Permiten la obtención de carragenatos y alginatos, que son sustancias gelatinosas que se usan como espesantes. Un ejemplo: Laminaria digitata, que es el alga más rica en yodo, elemento que interviene en la regulación de los lípidos. Se utiliza en tratamientos para pieles y cabellos grasos y en productos anticelulíticos, reductores y reafirmantes.

Algas rojas: La mayoría de estas algas crecen en las costas tropicales o subtropicales. Algunas son de agua dulce. Un ejemplo: Palmaria palmata, rica en cloro, potasio, calcio, sodio, magnesio, fósforo, mucílagos y aminoácidos, por lo que tiene una acción reequilibrante, hidratante y vasodilatadora.

Microalgas: La mayoría de ellas unicelulares y microscópicas, con propiedades hidratantes, nutritivas y antienvejecimiento. Un ejemplo: Spirulina platense, rica en proteínas, minerales como el hierro y vitaminas A, B y E.

Deja atrás el estrés y luce radiante gracias a los neurocosméticos, productos que transforman las rutinas de belleza en momentos de bienestar y relax.

Los frutos rojos y los cítricos son ricos en vitaminas, antioxidantes y aminoácidos. La vitamina A, por ejemplo, tiene propiedades calmantes y suavizantes, mientras que la E aumenta la microcirculación y ayuda a la regeneración de la piel.  

Los cítricos se utilizan mucho en fragancias, porque estimulan estados de ánimo. La naranja tiene un efecto antidepresivo, al igual que la bergamota, y el limón es refrescante y energizante.  

Las algas marinas son muy preciadas, entre otras razones, por su riqueza en sales minerales como el yodo, magnesio, potasio, hierro y zinc. De las más de 20.000 especies de algas, sólo una veintena se utiliza con fines estéticos, principalmente en forma de geles y cremas de texturas ligeras y refrescantes. Los productos a base de extracto de algas son poderosos hidratantes, tonificantes, cicatrizantes y relajantes. Los neurocosméticos a base de extracto de plantas son una fuente nutritiva y revitalizante importante para nuestra piel y pelo.  

El ginseng, el té verde, el cacao y el café son algunos de los ingredientes más utilizados. El extracto de ginseng, por ejemplo, destaca por su alto poder energizante y restaurador del desgaste físico y psíquico, además de retardar el envejecimiento cutáneo.

Las esencias florales se utilizan en cremas, lociones, tónicos, fragancias y aceites para masaje. Los extractos oleosos de las flores y hojas complementan las funciones básicas de la piel, además de estimular estados anímicos a través del olfato. Las rosas se usan en neurocosmética por sus cualidades tónicas y suavizantes que dan luminosidad a la piel y la refrescan. La lavanda, en cambio, relaja, armoniza, calma y estimula un sueño reponedor.