Productos con células madre para detener el envejecimiento de la piel, es la nueva revolución en la biocosmética. Un área de la ciencia que avanza velozmente y donde es necesario distinguir entre los efectos de las células madre humanas y vegetales.
Con el paso de los años y las agresiones ambientales, la piel empieza a oxidarse y los tejidos van perdiendo progresivamente la capacidad de regenerarse naturalmente, por lo que pierde flexibilidad y firmeza. Para combatir ese paso inexorable del tiempo, distintas investigaciones han buscado la nueva fórmula del rejuvenecimiento a través del uso de las células madre en la cosmética. Para quienes se han visto alarmados por esta tendencia, los expertos aclaran que, lejos de ser de células de origen humano o animal, se trata de células madre vegetales.
Las promesas de regeneración y renovación celular de las células madre para combatir las arrugas han marcado un vuelco en las tendencias de la cosmética, pues estamos volviendo a lo natural. "Quedó atrás la noción de que lo químico era lo mejor. Hoy, hay un regreso hacia lo natural y todos los estudios demuestran que son el elixir de la juventud", explica la doctora María José Moreno, de Beauty Clinic, quien agrega que hay dos grandes técnicas que actualmente llevan la delantera en la biocosmética: la inyección de sangre rica en plaquetas -extraídas del propio paciente- y la aplicación tópica de células madre. "El concepto del envejecimiento de la piel es parecido a una herida crónica, pero se han visto muy buenos resultados con el uso de las células madre en pieles maduras que responden como pieles adolescentes", explica la doctora Moreno.
Algunas células madre secretan sustancias beneficiosas para los seres humanos, aunque no se ha determinado del todo qué contienen y por qué nos benefician.
Los científicos explican que lo que efectivamente se comercializa son sustancias extraídas o compuestos a partir de células madre vegetales como péptidos, proteínas y enzimas que promueven la producción del colágeno, componente que mantiene la piel joven. Por lo tanto, las cremas que existen, en palabras simples, están alterando cómo las células se "comunican" y "hablan" entre ellas y las señales que se producen en las capas subcutáneas. Finalmente, es el trabajo de los péptidos el que estimula la producción de la fibra de la piel.
Lo que estas cremas buscan no es que las células madre se incorporen a la piel, sino que ésta aproveche las sustancias que secretan, ya que actúan de forma biomimética, integrándose y adaptándose a los tejidos de cada órgano, en este caso la piel.
Para reestructurarla, estimulan la producción de las células madre adultas que se encuentran en nuestro organismo para que se autorregeneren. Finalmente, serán las sustancias secretadas las que alterarán el tejido de las células madre en las capas de piel superficiales (epidermis) y también en las capas más profundas (dermis), promoviendo la reactivación y producción de nuevas células de la piel. Y así se verá más tersa y joven. ¿Qué son las células madre y de dónde se obtienen?